Según la Wikipedia, la República Popular de China tiene más de 1.300 millones de habitantes. Teniendo eso en cuenta, es totalmente lógico que se preocupen por sus desplazamientos y el volumen de pasajeros de cada viaje. Pensando en ello, tienen previsto construir autobuses gigantes que aprovechen las infraestructuras existentes para viajar por encima del asfalto, haciendo uso de los espacios entre las diferentes calzadas y entre carriles. La foto que acompaña al texto lo ilustra a la perfección.
En tiempos de crisis, la solución pasa por reconvertir las vías actuales para estos autobuses-tren con capacidad para 1.200 personas, que junto a paneles solares dotarían de energía al vehículo. Por el momento sólo se podrá instalar en zonas con espacio necesario, donde no haya puentes bajos, y las estaciones se construirían en plataformas adaptadas. La velocidad media de los transportes será de 40 kilómetros a la hora y podrían viajar tanto por ciudad como por vías interurbanas.
Se van a empezar construyendo y adaptando 186 kilómetros de vías en el distrito Mentougou de Pekín para finales de año. Si quieres ver un vídeo explicativo (en chino), lo tienes tras el salto. A pesar del idioma, es recomendable verlo para conocer la idea algo más en detalle.